La Asociación Nacional de Escuelas de Trabajo Social de Puerto Rico no apoya el Proyecto de la Cámara 1790 que dispone eliminar la colegiación en trabajo social como requisito para el ejercicio de la profesión

La Asociación Nacional de Escuelas de Trabajo Social de Puerto Rico no apoya el Proyecto de la Cámara 1790 que dispone eliminar la colegiación en trabajo social como requisito para el ejercicio de la profesión.

La Asociación Nacional de Escuelas de Trabajo Social de Puerto Rico (ANAETS) es una organización sin fines de lucro, de carácter académico, fundada en 1992. La ANAETS agrupa a programas subgraduados y graduados en Trabajo Social en Puerto Rico, así como a docentes, investigadores y estudiantes de Trabajo Social.  Además, la ANAETS está afiliada a la Asociación Latinoamericana de Enseñanza e Investigación en Trabajo Social (ALAEITS), al Consejo de Educación en Trabajo Social (CSWE, por sus siglas en inglés) y a la Asociación Internacional de Escuelas de Trabajo Social (IASSW, por sus siglas en inglés). A la vez trabaja en colaboración con el Colegio de Profesionales del Trabajo Social en Puerto Rico (CPTSPR).

La Asociación Nacional de Escuelas de Trabajo Social de Puerto Rico (ANAETS)se expresa en contra del Proyecto de la Cámara 1790. Partimos del reconocimiento de que la Profesión de Trabajo Social se enfrenta a diario a un ejercicio profesional de alta complejidad y demanda. Por su capacidad de incidencia en todos los niveles de atención social, es considerada un campo de trabajo primario en Puerto Rico. A tales efectos, su regulación, educación continua y cumplimiento del código de ética se hace indispensable.

La propuesta que se presenta en el proyecto debilita la regulación de la profesión, al delegar todas las responsabilidades en la Junta Examinadora de Profesionales del Trabajo Social, adscrita al Departamento de Estado.  Históricamente, la Junta Examinadora no ha contado con los recursos necesarios para mejorar los procesos de licenciamiento. Sin embargo, el proyecto añade responsabilidades adicionales como: monitorear el cumplimiento con la educación continuada, los procedimientos relacionados al cumplimiento del código de ética y el manejo de cualquier queja sobre el ejercicio profesional. Estas son funciones que la Junta Examinadora no podrá realizar, porque no cuenta con los recursos y el andamiaje administrativo para manejar los cambios propuestos. Sabemos que el Gobierno de Puerto Rico se encuentra en un momento de estrechez económica, que hace que su poder de regular y fiscalizar esté mucho más limitado.

Por tanto, los cambios propuestos tendrán un efecto contrario, al dejar un vacío en el espacio que ocupa el Colegio de Profesionales del Trabajo Social de Puerto Rico en velar por un ejercicio profesional riguroso, adecuado y basado en la ética de la profesión.  Estamos de acuerdo que el trabajo social en el ejercicio de su profesión necesita transformaciones que se atemperen a los cambios en el país y al avance de la profesión. Pero deben ser cambios que fortalezcan la profesión, que protejan sus espacios colectivos y participativos y que surjan como iniciativa de profesionales que ejercen la profesión.

El proyecto 1790 hace lo contrario, porque debilitaría uno de los espacios de participación colectiva con los que cuenta la profesión y no provee ninguna alternativa que compense el rol vital que tiene el Colegio de Profesionales del Trabajo Social en el avance de nuestra profesión y en su regulación.

Entendemos que las opiniones con respecto a esto, al interior de la profesión y escuelas, son diversas por lo que la organización reitera su compromiso en continuar generando espacios de discusión en donde se discutan los posicionamientos que mejor representen la educación y práctica del trabajo social en Puerto Rico.

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Dr. José L. Sierra Presidente

Profa. Liz Johanna Ortiz Laureano Secretaria

                                                                              

30 de enero de 2019